miércoles, 3 de septiembre de 2014

Mientras suena esa canción





Escuché una melodía, algo así como country. Abrí los ojos y eran tus manos tocándome como cuando acaricias las cuerdas de tu guitarra. 
Me sentí entonces como una partitura, ligera y eterna, dispuesta a formar parte de tus labios .
Miré por la ventana y noté la luna celosa, carente de miradas y poesías. 
Sabía que los versos de esa noche los escribiría  tan solo con tus besos. 
Esos besos que han dejado cicatriz en cada parte de mi cuerpo.
Abracé tus abrazos para vestir mi cuerpo desnudo e inspiré el húmedo perfume de tu relieve.

Entonces dejamos de ser carne y hueso,tan sólo fuego ardiente, fuego destructor.
Destruimos los muros que separaban nuestros sexos .
Tocaste de nuevo otra melodía, esta vez más cálida. Más profunda.



Más tarde, tarareaba aún esa canción